Todo en el marketing sucede por una razón, nada está al albedrío de la casualidad. Todos los productos promocionales de Apple aparecen con la misteriosa hora de las 9:41, ¿pero sabes por qué? A continuación tienes la respuesta.
Ciudad de México, 4 de abril (SinEmbargo/TicBeat).– 9 de enero de 2007, las 9:42 de la mañana, presentación del primer iPhone. Esa fue la fecha y hora en la que se presentó el primer iPhone, aquel dispositivo con el que Apple iba a “revolucionar el teléfono”. Justo apareció en la inmensa pantalla del recinto un iPhone con la hora de las 9:42 de la mañana, la hora real. A partir de ese momento todas las imágenes promocionales del teléfono encontradas en prensa, revistas o página web llevaban dicha hora. Hasta que se presentó el iPad.
WHATSAPP EN TABLETS
Con la presentación del iPad todo cambió. La tableta fue mostrada justo a las 9.41 horas de la mañana, momento en el cual apareció impresionado el flamante nuevo invento de la compañía. Y eso dura hasta el día de hoy. Si entras a la página oficial de Apple se verán que todos los productos de la empresa vienen con imágenes promocionales de las 9:41, un guiño a esa presentación, a esos momentos históricos de la compañía.
Pero hay una excepción, el Apple Watch. El reloj inteligente de los de Cupertino se presentó a las 10:09 de la mañana, ¿y por qué no a la misma hora de siempre? La mayoría de los relojes cuentan con la hora promocional de las 10:10, cuando las dos manijas están en una posición asimétrica que no tapa el logo de la empresa fabricante, que suele ir situado debajo de las 12. Apple quiso adelantar un minuto la hora de producto, no ha quedado claro el por qué, posiblemente para marcar un nuevo hito y diferenciarse del resto de fabricantes de relojes del mundo.
SIGUIENDO LA ESTELA DE STEVE JOBS
Apple diseña las presentaciones de manera que el gran anuncio se produzca a los 40 minutos aproximados del comienzo del evento. Cuando la imagen del producto aparece en pantalla, pretenden que sea el mismo tiempo que se muestra como hora real en los relojes de todos los asistentes, para dar una sensación de mayor realidad.
